Blogia
El desván

mi persona

Carta al orgullo

Carta al orgullo Querido orgullo:

No es una carta de despedida ya que creo que no sería capaz de vivir contigo ni sin ti. Sólo quería comentarte algunas cosas que rondan en mi cabeza de las que creo que muchas te importarán.

Eres violento, celoso, rencoroso, creo que deberías ser un poco más honrado en ciertas ocasiones y dejar atrás tu naturaleza de egoísta, bien que no sea fácil, pero puestos, hagamos un esfuerzo los dos.

Si es verdad que muchas veces he ganado gracias a ti, pero muchísimas más he perdido ya que no es siempre fiable respaldase en uno mismo y no ceder, aun así cero que te necesito, eres como la misma vida, si no estuvieses en mi vida no tendría la mitad de las cosas que tengo, no sabría ni un cuarto de lo que sé. Pero si no te hubiese tenido en esos momentos que gané, pongo la mano en el fuego que no hubiese perdido cosas más importantes que las que me hicistes ganar.

Es difícil darte la espalda y admitir mi errores sin rodeos, pero tu siempre estás ahí, encerrandome en mi mismo, no dejandome actuar como debiera… pero dandome fuerzas que no tendría sin ti. ¿Pero para que quiero la fuerza si no es para defenderte?, es todo un círculo vicioso, si no estubieses en mi vida… no necesitaría las cosas que aprecio, materiales y abstractas, ya que no tendría que sentirme de provecho ni importante, ya que no te tendría a ti, gran amigo egoísta, no tendría orgullo.

Como te anticipé al comienzo de esta carta, no es una carta de despedida, pero bien sabemos tu y yo que si pudiese elegir te apartaría de mi vida, de momento, mientras sigas ahí tendré que seguir fingiendo ser tu amigo.

Saludos.
La conciencia.